El Acuerdo de Asociación Estratégica entre el Mercosur y la Unión Europea, que se suscribió en 2019 tras más de veinte años de negociaciones y todavía no ha sido ratificado, probablemente sea el tratado de estas características más relevante firmado hasta el momento por nuestro bloque regional. Es un acuerdo histórico ya que, además de los aspectos comerciales de desgravación arancelaria, implica compromisos bilaterales sobre cooperación, diálogo político, democracia, derechos humanos y medio ambiente, entre otros.

En la actualidad, su ratificación se continúa negociando en el marco de múltiples tensiones entre los distintos actores involucrados, pues, si bien las estructuras del comercio exterior de ambos bloques regionales aparecen como complementarias, existe una fuerte sensibilidad con respecto a la protección industrial en el Mercosur y a la agrícola en la Unión Europea que impiden que el Acuerdo termine de ser aceptado. En esta discusión, el carácter proteccionista no implica únicamente la voluntad política de sostener la actividad económica y el empleo, sino también la necesidad de preservar rasgos identitarios de los modelos de desarrollo y de integración en cada uno de los bloques.

El objetivo de esta publicación es abordar los principales aspectos de las discusiones sobre la validación del Acuerdo y los eventuales impactos económicos, ambientales y de género que podría tener su ratificación. Esperamos que este documento sirva para plantear un debate serio que incluya una discusión honesta y rigurosa sobre los modelos de desarrollo y los tipos de integración compatibles con un esquema económico que priorice la generación de empleo de calidad, el valor agregado local y las cadenas productivas regionales, a la vez que cuide las condiciones ambientales en las que se lleva a cabo la producción y equilibre las desigualdades de género.