La mayoría de la humanidad vive en ciudades y las ciudades costarricenses son ejemplo de falta de sostenibilidad, es el territorio más afectado por las crisis, pero que tiene el mayor potencial para promover la transformación social ecológica.
Esta nueva forma de ver la ciudad, entenderla y pensarla, es un enfoque de red distribuida entre personas y ecosistemas, no en sus límites administrativos, sino en los elementos que interactúan en ella y las conexiones entre ellos.
La planificación urbana no es solamente mapas, categorías, zonas y cifras. Una ciudad sostenible es diversidad e identidad y capacidades de las personas para recrear y reflejar la comunidad que vive en ella.