La economía dominicana es una que ha crecido con mucha intensidad y que se ha terciarizado, pero la estructura del empleo ha cambiado poco y la precariedad laboral persiste. La reinserción internacional de largo plazo ha descansado en los ingresos por remesas familiares, y las zonas francas y el turismo, sectores que aprovechan ventajas comparativas, que tienen bajos contenidos tecnológicos y que no prometen una inserción dinámica e incluyente. Los impactos ambientales negativos de la actividad económica conciernen a numerosos y diversos sectores vinculados al comercio exterior y a actividades no transables. La debilidad institucional y la incapacidad del Estado para regular la forma de producir es el factor común.
Publication Type: Study